You are not a tourist(?)
El plato estrella es la serie de mini reportajes titulados: ExperienceLess. La idea es sencilla: llegas a una ciudad, te sientas en la calle o en el metro con un cartelito de cartón que ga: I’m experienceless, please show me the most especial places in… (y la ciudad en cuestión), o I’m experienceless, i don’t want to see (aquí la ciudad) I wanna to live it! Help!, y esperas que algún indígena te recoja y te quiera como amigo. De su mano, podrás conocer todo aquello que el turista «normal» no ve, ni experimenta ni disfruta.
En estos videos, podemos ver todo un compendio de situaciones surreales en torno a la experiencia turística. Los creadores del web, se proponen viajar sin ser guiris, pero su periplo antiturístico cae una y otra vez en las geografías, actividades y representaciones «del otro» más turísticas.
Los ideales de ese viajero romántico, descubridor ocioso de culturas, que entra en contacto con la «realidad» de una sociedad singular, que es absorbido por las cosmologías de pueblos, ciudades y comunidades que viven a miles de quilómetros de casa, nutren la idea de Trourist. Como producto comercial que es, sabe atraer a un público afín a esos imaginarios y se adapta cómodamente a las formas de turismo urbano y las tecnologías de comunicación 2.0.
Los remotos lugares son ciudades punteras en el turismo internacional, el contacto entre hosts and guests se convierten en experiencias en la vida cotidiana con los locales. Se huye del patrimonio turístico más conocido, para adentrase en «la otra ciudad», alejada de sus semejantes, en contacto (en adopción) continuo con la pureza que portan los «de allí». A momentos, parece un alegato al desacreditado, por vanal, popular e impuro, ocio turístico de masas. La reveladora realidad no está al alcance de las masas.
En la web de máketing turístico, Turismo en la Dream Society, hacen una buena presentación de esta idea comercial: «Erase una vez una sociedad alimentada por las emociones, que huyó de los productos turísticos convencionales para desembarcar en los productos turísticos experienciales. Ahora, los proveedores de servicios serán sustituidos por los gestores de experiencias en un mercado abierto y co-creado bajo la filosofía 2.0.»
Nos apuntan en su decálago (medio decálago, 5) las razones por las cuáles no son turistas:
Porque quiero divertirme al máximo.
Porque detesto pagar más por menos.
Porque paso de lo masificado y lo artificial.
Porque soy más de hacer que de ver.
Porque me gusta tener conversaciones interesantes con la gente del lugar.
Porque quiero vivir experiencias que sean únicas y memorables.
Y nos dejan un video en el que otros seres nos dan sus razones.
I’m not a tourist from trourist on Vimeo.
Como no lo tiene esta entrada: Cinco consejos para ligar en un viaje.
Como explican aquí: «El proyecto Trourist ha sido el ganador del XII Premio José Manuel Kutz a Experiencias Empresariales de Éxito que otorga la ESTE-Facultad de CC.EE y Empresariales de la Universidad de Deusto y el Colegio Vasco de Economistas. Detrás del proyecto están Mikel Cortés, Jokin Bereciartu, Xabier Albeniz e Imanol Abad, pertenecientes al programa inNNoVanDis de la Universidad de Deusto, el objetivo de dicho premio es reconocer y destacar iniciativas en el ámbito de la creación de empresas y así lanzar proyectos innovadores contadas en primera persona por miembros del Colegio Vasco de Economistas».
En esta web (y otras) también se habla de Trourist.